miércoles, 19 de febrero de 2014

Ibanez Artcore AF-86





Avekrénides os presenta hoy otra buena guitarra, una belleza jazzera llamada Ibanez Artcore AF-86 VLS que ahora tiene justo a su lado. Uhmm  como disfruta viéndola y tocándola claro que para eso son las guitarras.

 Este modelo ya no está en catálogo pero se puede encontrar de segunda mano, aunque Ibanez, por supuesto, sigue fabricando su famosa serie Artcore que es uno de los grandes aciertos de este fabricante japonés.

Pero cuidado que no os deslumbre la belleza de este tipo de guitarras. No es una guitarra para hacerte el durillo delante de tus amigas, no para eso hay otros modelos. Esta es una guitarra para " gente dura",  para gente como Joe Pass , Pat Martino , este tipo de guitarristas hechos y derechos.




Para conseguir el deseado sonido jazzy, lo primero que hay que hacer es cambiar las cuerdas, generalmente las encuerdan para venta con unas D'Addario normales. Demasiado brillantes para lo que queremos. Es obligatorio poner cuerdas flatwound de entorchado plano. Por ejemplo unas Thomastik, la diferencia de sonido es muy grande . Es cierto que son mucho más caras pero son ideales para sonar jazzero.

En este punto es donde comienzan los problemas porque las cuerdas son más gruesas que las que montarías en una Strat, eso quiere decir que la tensión una vez montadas es mucho mayor. Las guitarras de jazz son duras de tocar, los bendings y demás virguerías son difíciles y necesitas mucha fuerza en los dedos.

Es una guitarra hollow body, de caja hueca con una anchura de 7 cm. La profundidad de sonido que da es impresionante muy diferente de las guitarras macizas.




El clavijero es Ibanez sencillo, típico de la marca pero que cumple perfectamente su función y aguanta bastante bien la afinación. La pala es elegante muy cuidada, con ese símbolo que parece un relámpago.
El mástil está muy bien, de perfil fino y muy suave una delicia para las manos.
Lleva 22 trastes con adornos rectangulares incrustados y con los bordes terminados en blanco que le dan un aspecto lujoso.
El puente no es fijo, la pieza de madera sobre la que apoya se puede mover adelante o atrás, dato a tener en cuanto a la hora de poner cuerdas nuevas y ajustar la guitarra. 




En cuanto a la electrónica, monta dos pastillas dobles (humbucker) de marca Ibanez que la verdad sorprenden por su buen sonido, muy limpio y cristalino, de calidad.
El selector es de tres posiciones, el típico, posición superior, pastilla del mástil. Posición intermedia conecta las dos pastillas y posición inferior selecciona la pastilla del puente mucho más aguda. Para tocar jazz es recomendable la posición del mástil los graves son muy buenos en este modelo.

Estas guitarras no juegan en la misma división que las Gibson, por ejemplo, guitarras mucho más caras y de maderas selectas.
Pero sus acabados si que son de primera, excelentes. Ibanez fabrica guitarras en distintos países y este modelo concreto está hecho en China.
No es ni bueno ni malo, los controles de calidad seguro que son japoneses por el alto nivel que ofrece. Pero si que se nota en el precio, muy asequible. Parece mentira, tal y como están los tiempos, que Ibanez esté dando estos acabados a estos precios. Un 10 para Ibanez de parte de Avekrénides.

El cuerpo es de arce laminado y tanto en una cara como en la otra las tapas son de arce flameado, muy bonito y le da un aspecto de guitarra top. El color es tipo violín.
El mástil es de caoba y arce, mientras que el diapasón es de palorosa. 

En definitiva una buena guitarra de jazz a un buen precio y que Avekrénides os recomienda para vuestros momentos jazzeros.










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