EGIPTO ES UN DON DEL NILO.
Toda la fama en el Valle de los Reyes se la lleva la tumba del rey Tutankamón, merecidamente porque apareció intacta con todos sus tesoros. Pero como construcción no vale gran cosa si la comparamos con la llamada KV9, una doble tumba muy rara que albergaba los restos de dos reyes de la XX dinastía, Ramsés V y Ramsés VI.
Impresionante, magnífica, una obra de arte que te deja completamente atónito. Imagínense los tesoros que esta tumba podría albergar. Cuando se contempla algo así ni las palabras ni las fotos le pueden hacer justicia.
El llamado Valle de los Reyes se encuentra situado en la orilla oeste del Nilo justo enfrente de la antigua Tebas, hoy la ciudad de Luxor.
Es el lugar que eligieron la mayoría de los reyes y reinas del Imperio Nuevo egipcio para construirse sus tumbas.
La de Ramsés VI se encuentra en un lugar privilegiado en la zona central del valle. Es un mausoleo excavado en la roca y hacia abajo con una pendiente de unos 45 metros.
Un largo pasillo de unos 100 metros nos lleva hacia la cámara mortuoria en donde nos encontramos con el sarcófago reconstruido de Ramsés VI.
Es una sala rectangular con el techo abovedado decorado con la diosa Nut y con escenas del Libro de los Cielos.
El estado de conservación de los relieves y pinturas es magnífico y eso que la tumba ha sufrido varias inundaciones, sobresalen los colores rojos, amarillos y el azul egipcio.
Ni un centímetro del mausoleo está sin decorar. A parte de las típicas escenas del Libro de los Muertos, hay escenas del Libro de los orígenes del cielo, de la tierra y del sol. Amón está omnipresente, era el dios que creaba la vida para los egipcios.
Por desgracia esta tumba ya fue saqueada en la Antigüedad, así que de sus riquezas no nos ha llegado nada. Se sabe que estuvo abierta o que los cazatesoros periódicamente la visitaban porque hay inscripciones en lenguajes como el demótico, el latín y el griego antiguo.
La verdad que no me extraña que la gente acudiera aquí a presenciar esto porque realmente impresiona mucho.
Una auténtica maravilla hecha por artesanos anónimos, muy buenos técnicamente de los que la Historia no dice nada. Una pena y más teniendo en cuenta la vulgaridad de los tiempos que nos toca vivir.
Vivían en un poblado conocido hoy como Dehir-el-Medina, que ha sido continuamente excavado e investigado, estaba muy cerca del Valle de los Reyes y los datos que nos aporta son interesantísimos para conocer su forma de vida.
Hay muchas cosas en Egipto que te calan hondo si eres una persona interesada en la Arqueología o la Historia Antigua, incluso para el turista normal que siente inquietud por visitar ese magnífico país.
La KV9 sin duda es una de ellas y si alguna vez tienen la gran suerte de visitar el Valle de los Reyes no solo se interesen por Tutankamón y su pequeña tumba, les recomiendo que pasen primero por la de Ramsés VI y ya me contarán sus impresiones.
La de Ramsés VI se encuentra en un lugar privilegiado en la zona central del valle. Es un mausoleo excavado en la roca y hacia abajo con una pendiente de unos 45 metros.
Un largo pasillo de unos 100 metros nos lleva hacia la cámara mortuoria en donde nos encontramos con el sarcófago reconstruido de Ramsés VI.
Es una sala rectangular con el techo abovedado decorado con la diosa Nut y con escenas del Libro de los Cielos.
El estado de conservación de los relieves y pinturas es magnífico y eso que la tumba ha sufrido varias inundaciones, sobresalen los colores rojos, amarillos y el azul egipcio.
Ni un centímetro del mausoleo está sin decorar. A parte de las típicas escenas del Libro de los Muertos, hay escenas del Libro de los orígenes del cielo, de la tierra y del sol. Amón está omnipresente, era el dios que creaba la vida para los egipcios.
Por desgracia esta tumba ya fue saqueada en la Antigüedad, así que de sus riquezas no nos ha llegado nada. Se sabe que estuvo abierta o que los cazatesoros periódicamente la visitaban porque hay inscripciones en lenguajes como el demótico, el latín y el griego antiguo.
La verdad que no me extraña que la gente acudiera aquí a presenciar esto porque realmente impresiona mucho.
Una auténtica maravilla hecha por artesanos anónimos, muy buenos técnicamente de los que la Historia no dice nada. Una pena y más teniendo en cuenta la vulgaridad de los tiempos que nos toca vivir.
Vivían en un poblado conocido hoy como Dehir-el-Medina, que ha sido continuamente excavado e investigado, estaba muy cerca del Valle de los Reyes y los datos que nos aporta son interesantísimos para conocer su forma de vida.
Hay muchas cosas en Egipto que te calan hondo si eres una persona interesada en la Arqueología o la Historia Antigua, incluso para el turista normal que siente inquietud por visitar ese magnífico país.
La KV9 sin duda es una de ellas y si alguna vez tienen la gran suerte de visitar el Valle de los Reyes no solo se interesen por Tutankamón y su pequeña tumba, les recomiendo que pasen primero por la de Ramsés VI y ya me contarán sus impresiones.
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